Calvos, sueños y Backstreet Boys

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No han pasado ni 24h desde que estrenaron uno de los anuncios más esperados del año. Al igual que Estrella Damm abre las puertas al verano, Loterías da comienzo a la temporada navideña, aunque los supermercados tengan el turrón puesto desde hace un mes. Ayer por la tarde no sé en qué momento estrenaron el spot, pero fue entrar en Twitter y encontrarme a medio timeline criticando y retwiteando a gente que mostraba su opinión sin cortarse un pelo. Yo también descargué mi furia.

Desde mi punto de vista, no es una buena campaña. Me acuerdo cuando leí la noticia de que sería con caras conocidas. En ese momento mis espectativas empezaron a bajar. Luego vi el making of y confié en que podría sorprender con algo bonito. Entonces vi el anuncio. EL ANUNCIO ¿o más bien Pesadilla antes de Navidad? Un videoclip con cinco caras conocidas, versionando a Elvis, en la plaza de Pedraza. Como dice el anuncio de Tuenti, «lo tiene todo papi» todo para poder ser una propuesta bonita, pero al final encontramos un vídeo infumable, y ya cuando vemos a Raphael con sus gestos, el momento Pantene de Marta Sanchez o a Monserrat Caballé dando miedo,  podemos pensar un tierra trágame, dime que esto no es verdad. Me ha dejado helada. Con lo bonitas que son las callejuelas, lo único que me gusta del spot son los segundos donde el niño sale corriendo con la vela en las manos.

Este anuncio es mal. Y sí, el concepto «es mal» es peor que decir «es un anuncio malo».

Es verdad que el calvo de la lotería nos tuvo acostumbrados a otra cosa, a anuncios ingeniosos, originales, bonitos, con alegría, ilusión y ganas de disfrutar de la navidad. Cuando GREY trabajó para Loterías, hicieron dos campañas, Fábrica de Sueños y Cazadores de sueños, cargadas de fantasía, llenas de insights y con una producción de cine, era como ver una película corta. Sin embargo para esta campaña, aunque han contado con Pablo Berger, creador de la película muda Blancanieves que ha sido ganadora de diez premios Goya, parece que tanto premio, tanto premio, no ha servido para nada. Este spot no transmite y no ha funcionado para transmitir el mensaje de la navidad al que nos tenían acostumbrados. Con los spots de años anteriores dejaron el listón muy alto.

Menos mal que lo han versionado y han hecho un remake del spot con Backstreet Boys. Sin duda, mucho mejor esta versión que la original. Pasen, vean y rían. Mientras, esperaré a ver el anuncio de Freixenet, otro de los spots más esperados del año.

ACTUALIZACIÓN

Me acaban de comentar vía FB que también se ha hecho una versión con el Rey León. Como veis, cualquier cosa queda mejor que el spot original.

De sueños… o recuerdos

Hace poco tuve un sueño que desde entonces no se me ha borrado de la cabeza y que recuerdo a la perfección.

Estaba en una camilla, en una habitación con paredes verde vichy, como si se tratara de un hospital, alguien me ponía una máscara de oxígeno diciéndome que olía a menta y que me iba a entrar mucho sueño. En menos de que contara tres recuerdo que me quedé dormida. Cuando me desperté estaba en otra habitación, no recuerdo si de paredes azules o beige, pero estaba con una venda cerca de la barbilla y me decían que todo había salido estupendamente, que los puntos me los quitarían en unos días y que pronto estaría fuera.

Tengo recuerdos de entrar en una camilla en el hospital y ver una foto de Minnie como esta enmarcada en la pared de una recepción, de dar paseos por los pasillos en una silla de ruedas, que me regalaran un juguete con forma de rana verde y desde entonces no me acuerdo de nada más.

Pero cada vez que me miro al espejo desde hace catorce años veo la cicatriz. El flequillo de medio lado trata de tapar la más grande para que se disimule mejor y pocas veces voy con el pelo completamente echado hacia atrás. Aunque la gente me diga que me queda bien estar sin flequillo o me lo aparten con cariño no acabo de estar cómoda. La marca que tengo al borde del labio inferior no se nota, la de la nariz menos y el lagrimal simplemente deja que caiga una lágrima aunque no tenga ganas de llorar. Desde entonces viene de ahí mi temor a los perros grandes negros, que me den respeto cuando ladren y que odie que salten poniéndose a mi altura.

Ese sueño podría ser simplemente un sueño más si no tuviese algo que ver con lo que ocurrió hace años, pero igual es un recuerdo, la mente, que hace cosas así de extrañas cuando no te das cuenta. Lo que me extraña es que es un sueño que recuerdo tan bien que aunque hayan pasado días desde que esa historia apareció en mi cabeza es como si la hubiera vivido hace poco. Así que ahora estoy con la incertidumbre de saber si eso pasó de verdad o es todo fruto de mi imaginación.